Un día conocí a alguien por Internet, yo había pedido ayuda en el foro y ella me tendió su mano. Nos dimos cuenta de que teníamos muchas cosas en común, ella tenía un gran corazón lleno de amor por la vida, por la gente, por la pintura… y yo muchas ganas de compartirlas. Ella me presentó su blog y me descubrió un mundo nuevo para mí. Me abrió las puertas de un paraíso ignorado y me ayudó a entrar en él. Desde entonces una preciosa amistad nos une. Cada día, a través de la red, ella me apoya y yo la apoyo. Un lazo invisible nos une en la distancia, un anhelo nos mantiene conectadas.
Desde el primer día algo me atrapó en su blog, el video de la canción ALEGRIA del Circo del Sol. Cada mañana pincho en el enlace y me sumerjo en su magia, mi corazón danza entre las bailarinas y sin darme cuenta tarareo la canción y cuando quiero acordar la alegría se adueña de mí.
Un día sentí el fuerte deseo de atrapar esas escenas, de hacerlas mías, de inmortalizar los sentimientos que despertaban en mí. Cogí mis pinceles y un lienzo y me puse manos a la obra. El resultado es un regalo para ella, la amiga que me ha conducido hacia el reencuentro con la alegría.
Ahora espero impaciente el día en que las fuerzas de las dos nos permitan reunirnos y conocernos en persona para entregarle en mano “La Alegria”, compartirla con ella y darle un fuerte abrazo.
jdiana